La organización Vente Venezuela ha denunciado recientemente la detención arbitraria de Marcos Castillo, abogado y miembro activo del Comando ConVzla en el estado Apure. El incidente ha suscitado preocupaciones tanto a nivel nacional como internacional, dado el contexto político complejo en Venezuela.
Según la información difundida por la instancia de derechos humanos de Vente Venezuela en la plataforma X, Castillo fue apresado a la fuerza por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana mientras se encontraba en los tribunales de Apure. «La persecución y criminalización política ha aumentado en los últimos días», indicaron en su comunicado. Aún más preocupante, es el hecho de que, hasta el momento, se desconoce el paradero de Castillo. Vente Venezuela ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para responsabilizar al régimen por cualquier daño que pudiera sufrir Castillo bajo custodia.
En paralelo, la Fundación de Derechos Humanos de los Llanos (Fundehullan) se pronunció calificando la detención de Castillo como arbitraria. La fundación subrayó que esta acción está supuestamente vinculada a una reunión política llevada a cabo en su domicilio durante la campaña electoral presidencial del pasado 28 de julio. A través de su declaración en X, Fundehullan instó al Estado venezolano a respetar los derechos a la libertad personal y de expresión, tal como están consagrados en la Constitución Nacional.
En el contexto de esta detención, Venezuela sigue sumida en una crisis política potenciada tras los comicios del 28 de julio, donde el Consejo Nacional Electoral proclamó al presidente Nicolás Maduro como vencedor sin divulgar detalles específicos de los resultados. Esta situación ha sido vehementemente rechazada por la oposición y por varias entidades internacionales, quienes desconocen la legitimidad del mandato de Maduro.
Un informe reciente del Foro Penal revela la gravedad del ambiente político, contabilizando 1.953 presos políticos en el país, 1.824 de los cuales fueron detenidos luego de las elecciones presidenciales. Esta cifra refleja la marcada y creciente polarización que atraviesa Venezuela, impactando de manera significativa la estabilidad institucional y los derechos humanos de sus ciudadanos.
La detención de Marcos Castillo se presenta, por tanto, como un reflejo más de las tensiones y desafíos que enfrenta el país, sumando un nuevo llamado de atención a la comunidad internacional para vigilar y actuar ante estas situaciones que afectan directamente los principios democráticos y derechos fundamentales.