En un acto de solidaridad y demanda de justicia, familiares y amigos de los jóvenes encarcelados tras las protestas ciudadanas posteriores a la elección presidencial se congregaron el jueves 7 de noviembre en la Plaza Bolívar de Guanare. La manifestación, marcada por la presencia de pancartas, globos y camisetas blancas con las imágenes de los detenidos, sirvió para expresar el descontento con el proceso judicial y las condiciones de reclusión de los jóvenes.
Las madres de los encarcelados alzaron sus voces en una denuncia pública, señalando que sus hijos se encuentran «enfermos por hambre y depresión» debido a las condiciones adversas en las que están siendo retenidos. Andreina Peñaloza, hermana de uno de los detenidos, Jhonny Peñaloza, destacó que los «15 muchachos procesados por terrorismo», con edades entre 19 y 28 años, llevan casi cuatro meses encarcelados injustamente en las penitenciarías de Yare y Tocorón.
La protesta también buscó llamar la atención sobre el caso de estos jóvenes, quienes son acusados de participar en el daño del monumento Indio Coromoto. Las familias y amigos presentes en la manifestación reclaman un juicio justo y piden una revisión de las circunstancias bajo las cuales sus seres queridos han sido detenidos.
Este evento subraya la creciente preocupación de la comunidad y los familiares por lo que consideran un trato injusto y desproporcionado hacia los detenidos, quienes alegan haber sido parte de una manifestación pacífica en ejercicio de sus derechos ciudadanos. Mientras tanto, la comunidad espera que las autoridades respondan a estas preocupaciones y provean una resolución justa para los implicados.
El Pitazo
