Los residentes de la comunidad Andrés Bello en Acarigua han manifestado su creciente preocupación debido a las persistentes fallas eléctricas que han experimentado durante las últimas cuatro semanas. La problemática se concentra específicamente en la intersección de la avenida 29 con calle 38B, Barrio Andrés Bello, a escasa distancia de la Fundación Mendoza.
El más reciente episodio se registró el pasado sábado 23 de noviembre, cuando nuevamente se presentó una interrupción del servicio eléctrico, afectando a los hogares de la zona. Ante esta situación, los habitantes han expresado su frustración al haber realizado repetidos reportes a Corpoelec, la empresa responsable del suministro eléctrico en la región.
Hasta la fecha, aseguran no haber recibido respuesta ni la presencia de técnicos para abordar el inconveniente, lo que ha llevado a los vecinos a reiterar su llamado urgente a las autoridades competentes para que se tomen medidas inmediatas y se restablezca el servicio de manera eficiente. La falta de electricidad no solo altera la vida diaria de los residentes, sino que también genera preocupaciones adicionales en términos de seguridad y bienestar comunitario.
En el contexto de esta problemática, la situación de Andrés Bello refleja una preocupación más amplia sobre el estado de la infraestructura eléctrica en diversas regiones del país, donde las interrupciones del suministro no son infrecuentes y suelen generar un impacto significativo en las comunidades afectadas.
La comunidad espera que las gestiones ante Corpoelec resulten pronto en una solución definitiva, para así aliviar la angustia que la falta de electricidad ha ocasionado entre los vecinos.