El Viernes 13 es reconocido en muchas culturas como un día de mala suerte, llevando a numerosas personas a evitar actividades como viajes, negociaciones y cualquier plan importante. Esta creencia, aunque ampliamente difundida, carece de un origen preciso y se basa en una combinación de supersticiones, teorías y mitos que han perdurado a lo largo del tiempo.
Origen y Significado del Viernes 13
La percepción negativa del Viernes 13 no está respaldada por hechos concretos, sino por una serie de creencias y leyendas. Una de las interpretaciones más comunes tiene su raíz en la religión católica. Según esta teoría, Jesús fue crucificado un viernes, y la célebre «Última Cena» se llevó a cabo con 12 apóstoles, sumando 13 personas en total. Además, el capítulo 13 del Apocalipsis se asocia con el anticristo y la bestia. Estas conexiones numerológicas fortalecen la idea de un día desafortunado.
En la religión judía, el número 13 es considerado desfavorable, relacionado con 13 espíritus malignos y el relato del carnero que Abraham debía sacrificar a Dios. Para los cristianos, el número 13 también simboliza a los invitados de la Última Cena y el Anticristo.
Otra versión interesante proviene de la mitología vikinga, donde el número 13 se asocia con la traición, especialmente ligada a Loki, el dios conocido por su naturaleza engañosa y caótica.
La Visión de los Escritores sobre el Viernes 13
Más allá de las tradiciones religiosas y mitológicas, la literatura también ha contribuido a consolidar la reputación negativa del Viernes 13. Geoffrey Chaucer, en su obra Los Cuentos de Canterbury, menciona que el «viernes» es considerado un día de desgracias. Por su parte, el escritor estadounidense Thomas Lawson publicó Friday, the Thirteenth, una historia en la que un corredor de bolsa elige este preciso día para provocar el colapso del mercado de valores, una narrativa que ha perpetuado la noción de evitar transacciones importantes en esta fecha.
A pesar de los múltiples relatos y teorías, el Viernes 13 sigue siendo objeto de especulación y superstición, reflejando la compleja relación entre la cultura, la creencia y la historia.