El multimillonario Elon Musk, actual responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), ha declarado que la administración de Donald Trump planea cerrar la Agencia de Ayuda al Desarrollo Internacional (USAID). Según el medio estadounidense Axios, Musk afirmó haber discutido en detalle los problemas de USAID con Trump, quien acordó proceder con el cierre de la agencia.
Durante un debate en X Spaces, Musk describió a USAID como «una bola de gusanos» y afirmó que «la vamos a cerrar». Sus comentarios surgieron en medio de una disputa con altos cargos de seguridad de USAID, quienes fueron puestos en licencia tras negarse a entregar material clasificado al equipo de inspección de Musk. Los funcionarios, John Voorhees y Brian McGill, consideraron legalmente obligados a negar el acceso debido a la falta de autorizaciones de seguridad adecuadas del equipo de DOGE.
En respuesta, la senadora Elizabeth Warren criticó a Trump por permitir el acceso de Musk a información personal de los ciudadanos y por bloquear la financiación gubernamental. Kate Miller, integrante de un consejo asesor de DOGE, aseguró que no se accedió a material clasificado sin las autorizaciones pertinentes.
Congelación de fondos y cambios operativos
La decisión de cerrar USAID se suma a la medida de Trump de congelar por 90 días la mayoría de los fondos destinados a programas de ayuda exterior, con excepciones para Israel y Egipto. USAID, que cuenta con un presupuesto superior a los 60,000 millones de dólares, ha sido un actor clave en la ayuda internacional, apoyando a 180 países en 2023.
Además, el sitio web y las cuentas de redes sociales de USAID han sido canceladas, y el equipo de DOGE ha llevado a cabo operaciones similares en el Departamento del Tesoro, accediendo a información confidencial, lo que provocó la renuncia de un alto funcionario del Tesoro.
Repercusiones y futuro
Las acciones de Musk y la administración Trump han generado una reacción significativa, especialmente entre los demócratas del Senado, quienes han exigido respuestas al secretario de Estado Marco Rubio sobre las visitas del personal de DOGE a USAID y las consecuencias para el personal de la agencia.
Estados Unidos, como el mayor donante de ayuda humanitaria del mundo, enfrenta ahora un desafío significativo en su política exterior y humanitaria. La comunidad internacional observa de cerca los desarrollos, mientras se debate el impacto de estas decisiones en la asistencia económica y humanitaria global.
