Jorge Rodríguez, designado para los diálogos de paz del gobierno de Nicolás Maduro, ha expresado su condena frente a la situación de 238 migrantes venezolanos en El Salvador. Según Rodríguez, estos migrantes fueron enviados a cárceles en el país centroamericano tras ser condenados por Estados Unidos por supuesto terrorismo, a pesar de que muchos no cuentan con antecedentes penales.
Durante una concentración convocada por el gobierno de Maduro, Rodríguez criticó los planes del presidente salvadoreño, Nayib Bukele, quien, según él, pretende usar a los venezolanos como «mano de obra esclava». Rodríguez sostuvo que esta acción estaría violando todas las leyes internacionales y comparó la situación con prácticas inhumanas de la historia: «Volvemos a los tiempos de la esclavitud, exactamente lo que hicieron los nazis con los judíos y con los comunistas».
Rodríguez afirmó que Bukele recibió seis millones de dólares y planea financiar su sistema penitenciario represivo mediante el trabajo de los venezolanos. Insistió en que estos migrantes «no tienen cuentas con la justicia», afirmando que «ninguno de ellos cometió ningún tipo de delitos ni en El Salvador ni en los Estados Unidos».
En su intervención, el representante de los diálogos de paz catalogó la situación como un «secuestro» y prometió no descansar hasta lograr el rescate de estos «mujeres y hombres venezolanos de bien». Además, señaló que el gobierno de Maduro llevará adelante denuncias en foros internacionales: «Vamos a ir a donde tengamos que ir, a todas las multilaterales, vamos a hablar con todos los países».
La situación planteada por Rodríguez ha suscitado una profunda preocupación sobre el trato de los migrantes venezolanos, resaltando la necesidad de un diálogo con la comunidad internacional para abordar y resolver la situación.
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