En una operación conjunta llevada a cabo en los Cayos de Florida, siete migrantes indocumentados, originarios de Cuba y Guatemala, fueron arrestados. Esta acción fue parte de un esfuerzo coordinado entre varias agencias para aumentar la seguridad en la región mediante la «eliminación de delincuentes peligrosos de las comunidades locales», según un comunicado de la Patrulla Fronteriza del sector Miami emitido este lunes.
La operación involucró la colaboración de agentes de Marathon, la Oficina del Sheriff del Condado de Monroe, el Departamento de Policía de Key West, y el Departamento Correccional de Florida. Entre los detenidos, se encuentran tres ciudadanos cubanos con antecedentes penales por delitos como maltrato a personas mayores, tráfico de metanfetaminas y contrabando de oxicodona. Además, fue arrestado un ciudadano guatemalteco con una condena previa por conducir bajo la influencia del alcohol y causar lesiones graves a otra persona.
«Los inmigrantes indocumentados ya no se esconderán en las sombras de la burocracia», declaró Jeffrey Dinise, jefe del sector Miami de la Patrulla Fronteriza. «En el estado de Florida hemos eliminado las barreras entre las jurisdicciones locales, estatales y federales, permaneciendo unidos como agentes del orden público para salvaguardar a nuestras comunidades y proteger a nuestra nación de los inmigrantes indocumentados».
Los migrantes arrestados han sido procesados y transferidos a la custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), donde permanecen detenidos en espera de su deportación de los Estados Unidos.
Esta reciente operación sigue a otra lanzada a principios de marzo, en la que se arrestaron diez inmigrantes indocumentados en los Cayos, identificados como delincuentes sexuales condenados. La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos ha enfatizado su continuidad en el esfuerzo por mantener la seguridad en la región mediante operativos estratégicos y colaborativos.
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