El venezolano Luis Arráez, bateador de los Padres de San Diego, se encuentra en condición «estable» después de ser hospitalizado este domingo debido a una fuerte colisión durante un partido celebrado en Houston, Texas. El equipo de las Grandes Ligas de béisbol fue el encargado de reportar la noticia.
Arráez, de 28 años, se vio envuelto en un choque con el hondureño Mauricio Dubón mientras intentaba llegar a primera base, durante la segunda jugada del partido entre los Padres y los Astros, llevado a cabo en el Daikin Park. El incidente ocurrió cuando Arráez, actuando como bateador designado, intentó un golpe de sacrificio que fue interceptado por Christian Walker. Dubón se dirigía hacia la primera base para recibir el lanzamiento de Walker cuando colisionó con Arráez, aparentemente golpeándolo con el codo en la barbilla.
El venezolano se desplomó en el campo y fue asistido durante varios minutos antes de ser retirado en camilla. A pesar de la gravedad del momento, Arráez logró hacer una señal con el pulgar hacia arriba antes de abandonar el campo, lo que tranquilizó a los espectadores presentes.
En un comunicado posterior, los Padres informaron que, tras ser hospitalizado, Luis Arráez estaba «estable, consciente, receptivo y podía mover sus extremidades». El jugador fue trasladado al hospital Metodista de Houston para una evaluación más detallada.
El mánager de los Padres, Mike Shildt, declaró a ESPN: «Fue muy aterrador. No vemos mucho ese tipo de choques en nuestro deporte».
En cuanto a su desempeño, Luis Arráez acumula tres jonrones y siete carreras impulsadas en su segunda temporada con San Diego. Cabe destacar que el año pasado se convirtió en el primer jugador de las Grandes Ligas en ganar tres títulos consecutivos de bateo con tres franquicias distintas: Mellizos de Minnesota (2022), Marlins de Miami (2023) y Padres (2024).
AFP