El gobierno de Donald Trump está a punto de aceptar un Boeing 747-800 de lujo, donado por la familia real de Qatar, que podría convertirse en el nuevo Air Force One, según informaron este domingo medios estadounidenses. Este avión, al que el canal ABC News denominó «El palacio en el cielo», está valorado en 400 millones de dólares, lo que lo convertirá en el activo más caro donado por un gobierno extranjero a Estados Unidos.
De acuerdo con las fuentes citadas por ABC News, el anuncio de este regalo se hará durante la gira del presidente estadounidense en Oriente Medio, la cual incluye una visita a Qatar. Donald Trump tiene la intención de utilizar este lujoso avión para reemplazar los dos Boeing 747-200B actuales, en servicio desde 1990 bajo la presidencia de George H.W. Bush. Estas aeronaves ya son consideradas obsoletas y generan costos de mantenimiento significativos.
Informes de la prensa sugieren que Trump podrá continuar utilizando el jet donado después de dejar el cargo, ya que el gobierno planea transferir su propiedad de la Fuerza Aérea a la fundación presidencial del mandatario. Según afirma ABC, la administración Trump considera que esta transacción es legal y no infringe las leyes anticorrupción ni las disposiciones constitucionales que impiden a un funcionario aceptar regalos de un monarca o estado extranjero.
Sin embargo, un portavoz de la embajada de Qatar en Estados Unidos calificó de «inexactas» las informaciones difundidas por los medios. Ali al Ansari, vocero catarí, declaró que la posible transferencia del avión para su uso temporal como Air Force One está siendo discutida entre los Ministerios de Defensa de Qatar y Estados Unidos, pero que aún no se ha tomado ninguna decisión definitiva.
Por su parte, la Casa Blanca no ha respondido a las solicitudes de información de la AFP. Cabe destacar que Boeing había prometido entregar dos nuevos aviones al gobierno estadounidense; no obstante, la compañía enfrenta problemas económicos y de calidad, lo que ha generado retrasos crecientes. En respuesta a esta situación, Trump sugirió en febrero que el nuevo avión presidencial podría ser adquirido de otro país.
El avión debe estar equipado con tecnología de comunicaciones avanzada, instalaciones médicas y un sistema de defensa de alto rendimiento. Según el diario Wall Street Journal, la empresa L3Harris ya ha sido contratada para adaptar el avión de lujo catarí a estos requisitos técnicos.
AFP
