La Corte Suprema de Justicia de Argentina ha confirmado la sentencia de seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, adjudicada por el delito de administración fraudulenta en perjuicio del Estado. La decisión ha sido tomada en respuesta al escándalo de corrupción que involucra la adjudicación de obras viales a un socio y presunto testaferro durante su mandato entre 2007 y 2015.
Kirchner, quien tiene 72 años, podrá cumplir la condena en prisión domiciliaria debido a su edad. La Corte rechazó el recurso de queja presentado por su defensa, así como la solicitud de la Fiscalía que buscaba duplicar la pena a 12 años y agregar el delito de asociación ilícita. La justicia ha otorgado un plazo de cinco días hábiles a la expresidenta para presentarse ante los tribunales a fin de ser detenida.
Recientemente, Cristina Kirchner había anunciado su intención de postularse como candidata a diputada en las próximas elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, programadas para septiembre. Sin embargo, la ratificación de su inhabilitación política de por vida le impedirá participar en dichos comicios, trastocando sus planes políticos futuros.
La condena y sus implicaciones han generado un significativo impacto en el escenario político argentino, donde Kirchner se ha mantenido como una figura influyente, incluso durante su reciente período como vicepresidenta bajo la administración de Alberto Fernández (2019-2023). La sentencia representa un hito en la lucha contra la corrupción en el país, reafirmando la independencia del poder judicial argentino.
Fuente: Veronica Smink, BBC News Mundo, Argentina.
