Las autoridades del penal Mar Verde, en Santiago de Cuba, denegaron el lunes la visita familiar al líder opositor José Daniel Ferrer, según denunció su hermana, Ana Belkis Ferrer, mediante redes sociales. En el lugar se encontraban su esposa, la doctora Nelva Ismarays Ortega, y dos de sus hijos, quienes esperaron por dos horas en un salón del penal antes de que se les informara que el día de visita era el próximo 11 de junio.
Durante la espera, el jefe de la prisión, identificado como Vladimir Pineda Guerra, se acercó a Ortega para cuestionar su presencia, reafirmando que la visita estaba programada para otra fecha. Además, se les negó la entrega de una bolsa de alimentos destinada a Ferrer. «Tuvieron que regresar con toda la jaba, los deseos de ver a José Daniel y la preocupación de cómo seguirá y qué estará sucediendo», expresó Ana Belkis Ferrer.
La negativa a las visitas familiares y conyugales se ha convertido en una medida rutinaria de represión por parte del régimen contra Ferrer. Desde su más reciente detención, solo ha podido ver a su familia durante tres minutos el pasado 10 de mayo.
En una carta enviada pocos días después de su arresto el 29 de abril, Ferrer explicó que no consume los alimentos proporcionados en Mar Verde y depende de las provisiones que le llevan personas de confianza. Asimismo, denunció que fue golpeado al ingresar al penal para obligarlo a vestir el uniforme de preso común y afirmó que el ambiente en la prisión «está peor que nunca».
La libertad condicional de José Daniel Ferrer y del también líder opositor Félix Navarro fue revocada por el régimen cubano, tras haber sido excarcelados en enero. Ambos fueron aprehendidos el 29 de abril en sus respectivas viviendas en Santiago de Cuba y Matanzas, en operativos respaldados por la policía y la Seguridad del Estado.
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