Violeta Barrios de Chamorro, expresidenta de Nicaragua y pionera en ser la primera mujer elegida para liderar un país en el continente americano, falleció este sábado a los 95 años en Costa Rica. Su deceso se produjo tras una larga enfermedad, resultado de complicaciones derivadas del Alzheimer y una embolia cerebral sufrida en diciembre de 2018.
«Doña Violeta,» como era conocida popularmente entre los nicaragüenses, fue una figura clave en la transición de Nicaragua hacia la paz tras décadas de conflicto armado. Su gobierno, que se extendió de 1990 a 1997, se destacó por pacificar y reconciliar un país devastado por guerras. Félix Maradiaga, académico y activista político exiliado en Estados Unidos, afirmó a la AFP que su legado en la transición de la guerra a la paz es «incuestionable.»
Tras permanecer alejada de la vida pública durante dos décadas, Barrios de Chamorro fue trasladada de Managua a San José en octubre de 2023 para estar cerca de sus hijos, tres de los cuales fueron desterrados de Nicaragua por su oposición al actual presidente, Daniel Ortega.
Violeta Barrios de Chamorro nació el 18 de octubre de 1929 en la provincia de Rivas, Nicaragua. Proveniente de una familia prominente, se casó en 1950 con el periodista Pedro Joaquín Chamorro, cuya muerte a manos del gobierno de Anastasio Somoza en 1978 la impulsó a asumir la dirección del diario La Prensa y posteriormente a ingresar en la política.
En 1990, liderando una coalición de 14 partidos, Barrios de Chamorro derrotó sorpresivamente a Daniel Ortega en las elecciones presidenciales, poniendo fin a una etapa de gobierno sandinista. Durante su mandato, abolió el servicio militar obligatorio, completó el desarme de 20,000 guerrilleros y redujo el tamaño del Ejército Popular Sandinista. Además, fomentó la libertad de prensa y fortaleció la institucionalidad del país.
Sin embargo, su administración también implementó políticas de libre mercado y un plan de austeridad que generó huelgas masivas, provocando críticas de los sandinistas que la acusaban de desmantelar los avances sociales de la revolución.
La polarización política también cruzó su familia, ya que dos de sus hijos apoyaron a los sandinistas, mientras que los otros dos se alinearon con la oposición. En los últimos años, sus hijos han enfrentado persecuciones políticas debido a su activismo contra el actual gobierno de Ortega. Cristiana y Pedro Joaquín Chamorro fueron detenidos en 2021 y posteriormente expatriados en 2023 junto a otros opositores. Carlos Fernando Chamorro se exilió en Costa Rica, continuando su labor periodística desde allí.
El legado de Violeta Barrios de Chamorro permanece en la memoria de Nicaragua, mientras su historia sigue siendo un referente de lucha por la paz y la democracia en el país.
AFP