Las lluvias torrenciales que azotan el estado Mérida han dejado al descubierto la precaria condición de la infraestructura vial, especialmente en la zona del páramo. El colapso de caminos y puentes ha aislado comunidades y obstaculizado el transporte de alimentos y productos esenciales, según informaron fuentes locales.
Enrique Torres, presidente de la Cámara de Comercio de Mérida, advirtió que los daños en la carretera Transandina y en otros tramos clave reflejan una prolongada ausencia de mantenimiento preventivo. “No podemos seguir trabajando en cuanto a solamente reparaciones y las contingencias y las emergencias, pues cuando quedan así el deterioro es mucho más rápido y las consecuencias de este se notan cada vez que existe un evento de este tipo”, subrayó Torres en entrevista con El Nacional.
Aunque las autoridades han comenzado labores de reparación, Torres alertó que “los daños son grandes y se requerirá una inversión significativa por parte del Estado para recuperar completamente las vías, muchas de las cuales tienen más de un siglo de antigüedad”. Además, destacó que a pesar de contar con instituciones y normativas enfocadas en la gestión de riesgo, como las promovidas por la Universidad de Los Andes (ULA), “hace falta mucho más” para planificar y actuar ante este tipo de eventos.
El desbordamiento de los ríos Chama, Motatán y Santo Domingo no solo ha afectado la conectividad con otras regiones, sino que también ha golpeado al sector agroproductivo. Zonas como Apartaderos, Pueblo Llano, Timotes y Santo Domingo han reportado pérdidas cuantiosas en cultivos, siendo los productos más afectados tubérculos y verduras, fundamentales en la dieta venezolana.
La Cámara de Comercio advierte que la cadena de distribución de alimentos hacia otras regiones del país se ve comprometida. “¿Hay preocupación entre los empresarios sobre la continuidad operativa o el abastecimiento en las próximas semanas? Mucho. Sin embargo, la respuesta de la gobernación y de los entes públicos ha sido continua, ha sido inmediata; y bueno, toca trabajar mancomunadamente para que podamos reducir esas expectativas en cuanto a desabastecimiento o cualquier carencia que podamos sufrir en las próximas semanas”, expresó Torres.
La situación exige la atención urgente de las autoridades para mitigar los efectos del clima adverso y asegurar el abastecimiento de productos básicos para la población.
El Nacional
