Un juez federal de Estados Unidos ordenó al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) mejorar las condiciones de un centro de detención de migrantes en Nueva York. Esta decisión se produjo tras severas críticas recibidas por el estado del centro.
El magistrado Lewis Kaplan respondió a una demanda colectiva presentada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), la organización Make The Road y otros grupos. Estos denunciaron condiciones que calificaron de «abusivas» en el centro ubicado en el edificio 26 Federal Plaza, que también alberga un tribunal de inmigración.
Durante la audiencia, la abogada Heather Gregorio destacó que los detenidos tenían acceso limitado a servicios básicos, con «uno o dos retretes entre 40 a 90 personas», los cuales estaban a vista de todos, obligando a algunos a cubrirse con mantas de aluminio para obtener privacidad.
Ante esta situación, Kaplan dictaminó que, durante los próximos 14 días, ICE no podrá retener a migrantes en espacios que ofrezcan menos de 50 pies cuadrados por persona, equivalentes a aproximadamente 5 metros cuadrados. Además, exigió que cada detenido reciba tapetes para dormir con sábanas limpias y acceso a artículos esenciales como jabón, papel higiénico y compresas femeninas. El juez también ordenó que las áreas del centro sean limpiadas al menos tres veces al día, que a cada persona se le entregue un documento impreso con información sobre sus derechos, y que se les garantice la posibilidad de llamar a un abogado de forma confidencial en las primeras 24 horas tras su arresto.
Harold Solis, codirector legal de Make The Road New York, advirtió que ICE «no puede confinar a la gente en condiciones inhumanas ni obstruir su acceso a abogados», subrayando que la decisión del juez marca «límites claros a las perturbadoras e ilegales condiciones» que han enfrentado los migrantes. Esta resolución judicial representa un avance significativo en la protección de los derechos de los migrantes detenidos en Estados Unidos.
Espiga Noticias