La situación de los presos políticos en la cárcel de Tocorón, oficialmente conocida como Centro Penitenciario de Aragua, es cada vez más alarmante. De acuerdo con denuncias recientes del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), muchos de estos reclusos viven bajo condiciones inhumanas, enfrentando un clima de desesperanza que ha llevado a varios a intentar quitarse la vida.
En un reciente comunicado, el OVP alertó sobre los abusos sistemáticos, torturas físicas y psicológicas, así como el aislamiento forzado de al menos 58 presos políticos, quienes se encuentran separados del resto de la población penitenciaria sin justificación oficial.
«La muerte parece ser la única salida»
El OVP documentó el testimonio de la madre de uno de los reclusos, quien aseguró que el suicidio se ha convertido en una alternativa ante el sufrimiento diario. Las condiciones descritas incluyen celdas oscuras, calor sofocante, alimentación deficiente, falta de atención médica y la constante intimidación por parte de los custodios.
A los internos que intentan quitarse la vida, según las denuncias, se les traslada a la enfermería, donde son sedados pero no atendidos por especialistas en salud mental.
Tortura, aislamiento y castigo
Los presos reportan que los custodios, que ocultan sus identidades con capuchas y se comunican por apodos, aplican tratos crueles y degradantes. A los 58 reclusos aislados se les niega la luz solar, se les restringen las visitas, llamadas telefónicas y cualquier tipo de contacto digno con el exterior. La vigilancia es constante y opresiva.
Alimentación y agua en condiciones deplorables
La comida se limita a granos y arepas, muchas veces en mal estado, causando problemas intestinales. A diferencia del resto de la población carcelaria que recibe tres comidas al día, los presos políticos aislados solo reciben dos. Además, el agua disponible es salada y no apta para el consumo, lo que obliga a los familiares a llevar agua potable en cada visita.
El Estado incumple medidas de la Corte IDH
El OVP recuerda que en 2010, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) dictó medidas provisionales para la cárcel de Tocorón, las cuales el Estado venezolano continúa ignorando. Mientras tanto, el organismo sigue documentando las graves violaciones de derechos humanos y alertando a instancias internacionales.
Espiga Noticias