Acarigua – Vecinos de la quinta etapa de Goajira denunciaron el alarmante deterioro de la Unidad Educativa Miguel Otero Silva, ubicada en Acarigua, cuya infraestructura está cubierta de maleza y escombros, generando un grave foco de inseguridad en la comunidad.
Según declaraciones recogidas por El Acarigueño, los residentes aseguran que el plantel se ha convertido en escondite para delincuentes y consumidores de drogas, lo que representa un peligro constante, especialmente para los niños del sector. Entre los matorrales, además, proliferan serpientes y alacranes, impidiendo que los espacios comunes puedan ser utilizados con normalidad.
“El estado en el que está la escuela es increíble”, expresó Maribel Rojas, vecina del sector, quien también cuestionó la inacción de dirigentes comunitarios y jefes de UBCH, señalados por los vecinos de ignorar la problemática e incluso de usar las instalaciones para reuniones privadas.
El malestar se extiende por supuestas irregularidades en el manejo de recursos públicos que debieron ser destinados al mejoramiento del plantel. La mayoría de los habitantes afectados son adultos mayores que denuncian vivir con miedo, lo que ha frenado acciones formales por temor a represalias.
La comunidad solicita a las autoridades:
- Limpieza urgente de las instalaciones
- Inspección oficial de las condiciones del plantel
- Auditoría pública sobre los fondos asignados
- Canales seguros para denuncias ciudadanas
Los vecinos insisten en que la escuela debe ser un lugar seguro para el aprendizaje, no un foco de peligro.
Espiga Noticias