El primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, aseguró que las recientes amenazas del gobierno de Estados Unidos contra Venezuela responden a una estrategia impulsada por la llamada “Mafia de Miami”, que opera en alianza con sectores extremistas de la oposición venezolana y políticos del sur de Florida.
Durante la emisión de su programa Con el Mazo Dando, Cabello afirmó que la carta enviada por el presidente Nicolás Maduro a su homólogo estadounidense, Donald Trump, “ha generado una verdadera conmoción” en los sectores más radicales del Congreso estadounidense, quienes —según dijo— “ahora exigen explicaciones por la agresión injustificada hacia Venezuela”.
“Esa carta puso a temblar a más de uno. El amigo del imperio, ‘Little Marco’, se volvió loco. Están desesperados porque su narrativa se les cae”, dijo en alusión al senador Marco Rubio.
Cabello también denunció la circulación de una encuesta falsa, que supuestamente muestra apoyo entre ciudadanos estadounidenses a una posible ofensiva militar contra Venezuela, basándose únicamente en emociones compartidas en redes sociales. Aseguró que el estudio fue firmado por Andres Guilarte y Daniel Tirado, a quienes describió como “dos extremistas venezolanos” con vínculos en movimientos como Vente Venezuela, Voto Joven y el programa Lidera, perteneciente a la ONG Futuro Presente.
“Estos personajes viven en Miami rodeados de la misma basura que se hace llamar exilio, trabajando con gente como Rick Scott y María Elvira Salazar, promoviendo una guerra psicológica contra nuestro país con el apoyo de los palangristas de siempre”, citó Cabello al leer una carta del “Patriota VIP”.
Finalmente, calificó las acciones de EE. UU. como parte de una “campaña de miedo vacía”, sin consecuencias reales: “Tanto barco, tanto escándalo… y al final, no hacen nada. Es puro teatro para justificar el presupuesto militar y contentar a sus mafias del sur de Florida”.
Sin embargo, a pesar de las declaraciones de Cabello, Estados Unidos mantiene actualmente un despliegue militar de alta capacidad en aguas del Caribe, bajo operaciones del Comando Sur
Estos movimientos se enmarcan en la operación estadounidense para combatir el narcotráfico en el Caribe, pero también han sido interpretados como una clara advertencia geoestratégica hacia el gobierno venezolano. La presencia naval es real, activa y continúa aumentando.
Espiga Noticias