El coordinador residente y humanitario de las Naciones Unidas (ONU), Gianluca Rampolla del Tindaro, se reunió este viernes con el presidente Nicolás Maduro en el Palacio de Miraflores. El objetivo del encuentro fue presentar pruebas sobre una presunta conspiración promovida por el Gobierno de los Estados Unidos (EE. UU.) contra la República Bolivariana de Venezuela.
La reunión, que también contó con la presencia del canciller Yván Gil, se desarrolló en un ambiente cordial. Durante el encuentro, el mandatario venezolano expuso supuestas evidencias de un plan, calificado como «fascista», que tendría como fin invadir el país. Según Maduro, este plan buscaría generar violencia en las calles y orquestar un golpe de Estado para derrocar su gobierno, reelecto por el pueblo venezolano el pasado 28 de julio.
El presidente ratificó su compromiso con el diálogo y la Diplomacia Bolivariana de Paz, defendiendo el derecho internacional y el derecho del pueblo venezolano a vivir en paz y estabilidad. Además, condenó las «ilegales medidas coercitivas unilaterales» impuestas por EE. UU., calificándolas de neocolonialistas y violatorias del derecho internacional.
Maduro también rechazó los ataques coordinados por gobiernos de la derecha mundial, reafirmando que Venezuela es un país multiétnico, pluricultural, libre y soberano.
