La elección del horario para la cena puede ser determinante para la salud, según recientes investigaciones. Mientras que muchas personas ajustan sus horarios de comida de acuerdo a sus rutinas diarias y preferencias personales, la ciencia sugiere que seguir el ritmo circadiano podría ser fundamental para optimizar la salud.
El ritmo circadiano, según define la Cleveland Clinic, es el mecanismo interno del cuerpo que sigue un ciclo de 24 horas. Este «reloj interno» indica al organismo cuándo dormir, despertar y regula procesos como la digestión, la temperatura corporal y las hormonas. Comer desincronizado de este ritmo, como cenar tarde o ingerir alimentos durante la noche, puede perturbar estos procesos, llevando a problemas de salud como aumento de peso, trastornos del sueño y mayor riesgo de enfermedades crónicas, explica la dietista Samantha Cassetty.
El consenso entre los especialistas indica que cenar temprano ofrece varios beneficios. Terminar las comidas más temprano por la noche permite una mejor digestión y un control más eficaz del azúcar en sangre. Los estudios muestran que el cuerpo quema calorías de manera más eficiente y reduce el riesgo de almacenar energía en forma de grasa cuando se cena en sintonía con el pico metabólico del cuerpo.
Según un estudio publicado en la revista Cell Metabolism, comer tarde está relacionado con una quema de calorías más lenta y un metabolismo de las grasas alterado, promoviendo el almacenamiento de grasa. Además, las comidas nocturnas afectan las hormonas del hambre, aumentando la sensación de hambre y disminuyendo la saciedad.
Un estudio de 2024 destaca que quienes cenan más temprano tienen menor riesgo de obesidad y un mejor control del peso comparado con aquellos que lo hacen más tarde. Cenando a las 6 o 7 p. m., se logra una mejor alineación con los ritmos circadianos, optimizando el funcionamiento del cuerpo.
Para aquellos con horarios complicados, se recomienda preparar cenas saludables y ligeras si el horario ideal no es viable. Este enfoque busca equilibrar los beneficios metabólicos con la practicidad de la vida diaria.
