La utilización de compotas y alimentos de textura modificada se presenta como una estrategia alineada con las directrices internacionales para mejorar la nutrición en adultos mayores, especialmente en aquellos que presentan disfagia y riesgo de desnutrición. En este contexto, los colados Natulac se posicionan como una alternativa para asegurar una dieta suave, nutritiva y segura, en concordancia con las recomendaciones de organismos de salud global.
La nutrición en el adulto mayor es identificada como uno de los desafíos más relevantes de la salud pública mundial. El envejecimiento se asocia con cambios fisiológicos como disminución de la capacidad de masticación y deglución, reducción de la motilidad intestinal y pérdida de apetito, condiciones que elevan de manera significativa el riesgo de desnutrición proteico-calórica.
Organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) resaltan la necesidad de dietas que combinen alta densidad de nutrientes con facilidad de consumo. En la misma línea, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) señala que la alimentación en la vejez debe ser fraccionada y, de forma relevante, modificada en textura para adaptarse a las limitaciones funcionales de este grupo etario.
Diversos estudios sobre alimentación geriátrica han demostrado que los alimentos con consistencia modificada, como purés o compotas, facilitan la ingesta segura de calorías y micronutrientes esenciales en personas con disfagia. Esta forma de presentación contribuye a mantener la seguridad durante la alimentación y a reducir complicaciones asociadas a la deglución.
Entre los beneficios clave de las compotas en la dieta geriátrica se encuentra la fácil deglución y la seguridad. Su textura suave y homogénea reduce el riesgo de aspiración, aspecto relevante en pacientes con problemas de deglución. Además, aportan fibra y vitaminas, preservando los micronutrientes característicos de la fruta. La fibra natural de las compotas contribuye a prevenir y combatir el estreñimiento, una condición frecuente en la vejez.
Las compotas también ofrecen alta densidad nutricional, al concentrar energía y nutrientes en porciones pequeñas o controladas. Esto favorece el cumplimiento de los requerimientos calóricos diarios y resulta útil frente a la anorexia asociada al envejecimiento. Adicionalmente, su elevado contenido de agua aporta hidratación, apoyando el mantenimiento de un estado hídrico adecuado en una etapa de la vida en la que esta función se ve comprometida.
En este marco, las compotas Natulac, disponibles en sabores pera, manzana, durazno y coctel de frutas, incluidas versiones sin azúcar añadida, se presentan como una opción nutricional para la tercera edad. Sus presentaciones en envases de vidrio y Tetra Pak están diseñadas para facilitar la ingesta de nutrientes esenciales mediante una textura de fácil deglución. La marca orienta su oferta a favorecer el bienestar integral del adulto mayor mediante una dieta variada, suave y segura.
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