El tiempo libre durante las vacaciones escolares ofrece una oportunidad única para que los jóvenes cultiven rutinas saludables. El ejercicio, cuando es guiado y seguro, contribuye significativamente al equilibrio emocional, físico y social de los niños y adolescentes en plena etapa de crecimiento.
Con la llegada de las vacaciones, surge la eterna pregunta entre los padres y representantes: ¿cómo mantener a los más jóvenes activos y alejados del exceso de pantallas? La respuesta podría encontrarse en la práctica deportiva organizada, una alternativa eficiente que fomenta la salud y el bienestar de los menores.
Giacoma Capodiferro, directora comercial de Gold’s Gym Venezuela, destaca: “Empiezan las vacaciones y comienzan las preocupaciones de los padres y representantes sobre qué hacer con sus hijos en el tiempo libre. Estamos todos conscientes de la importancia de que descansen de su rutina diaria, pero tampoco queremos que pasen tanto tiempo con ocio, lo que finalmente los lleva a estar con mucha exposición a las pantallas, en redes sociales, en videojuegos, en las diferentes plataformas”.
Más allá de las pantallas: beneficios del entrenamiento físico
En una era cada vez más digital, ofrecer a los jóvenes espacios para el desarrollo físico se vuelve crucial. Diversos estudios han demostrado que el uso excesivo de pantallas puede tener impactos negativos en la salud visual, el desarrollo cognitivo, los patrones de sueño y la socialización. En este contexto, la actividad física se presenta como un contrapeso esencial.
Gold’s Gym ofrece durante las vacaciones una opción atractiva para adolescentes, proporcionando un entorno seguro y accesible para realizar ejercicio. Según Capodiferro, el bienestar físico y mental mejoran con el ejercicio: “Mejora la salud cardiovascular, fortalece músculos y huesos, y regula el ánimo de nuestros adolescentes. Para ellos en particular es clave, ya que están en la etapa de desarrollo físico y emocional”.
El gimnasio se convierte en una desconexión positiva, ayudando a los jóvenes a alejarse del estrés académico y del exceso de pantallas. Además, les permite canalizar su energía, despejar la mente y fomentar la socialización y la confianza. Las vacaciones son una oportunidad de oro para entrenar en grupo: “Se pueden venir acá con sus amigos del colegio y también tienen contacto con otras personas en el gimnasio, con su monitor, con su entrenador, lo que les permite socializar en las clases grupales”, añade Capodiferro.
Un espacio de desarrollo integral para todas las edades
Este centro de entrenamiento ofrece instalaciones de primer nivel en sus tres sedes ubicadas en Montalbán, San Ignacio y Margarita, facilitando el acceso desde distintas zonas de la ciudad. Los jóvenes pueden disfrutar de clases especiales diseñadas para sus necesidades, todas impartidas por instructores certificados que garantizan una guía segura y efectiva. La asesoría nutricional complementa el entrenamiento, promoviendo hábitos alimenticios saludables desde una edad temprana.
Diversos expertos en fitness subrayan que no importa la edad para iniciar una rutina de entrenamiento, siempre y cuando se cuente con la guía adecuada. “Lo más importante es que esta opción permite la formación de hábitos saludables. Es lo mejor que les podemos dar a nuestros hijos o representados para que en un futuro el hacer ejercicio ya sea parte de su rutina diaria”, concluye Capodiferro. Invertir en actividad física durante las vacaciones es sembrar las bases para una vida adulta más sana y equilibrada.
Especial