Un joven cubano, conocido como Elsito, falleció el miércoles en San Antonio de los Baños, Artemisa, debido a una intoxicación por monóxido de carbono al usar una planta eléctrica durante un apagón que duró más de 14 horas. Según reportes, el joven de 28 años encendió el generador para evitar robos, pero los gases emitidos por el equipo le provocaron una asfixia mientras dormía.
El incidente ocurrió en un contexto de crisis energética que ha afectado severamente a la isla, especialmente a las localidades fuera de la capital, donde los apagones pueden durar casi todo el día. Con un déficit eléctrico aproximado de 2000 MW diarios, muchos cubanos recurren a plantas eléctricas para satisfacer sus necesidades básicas.
Elsito fue trasladado inconsciente a un hospital local, donde falleció tras llegar con un paro respiratorio. El suceso ha conmocionado a la comunidad, dejando huérfana de padre a una niña. Las redes sociales se han llenado de mensajes de condolencias, reflejando el impacto de esta tragedia en la comunidad local.
Este caso resalta los riesgos asociados al uso de generadores eléctricos en hogares sin ventilación adecuada, especialmente en un país que enfrenta serios problemas de suministro energético.
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