Cada año, el 6 de enero, la Iglesia Católica conmemora la Epifanía y la visita de los Reyes Magos al recién nacido Niño Jesús en Belén, un evento de profunda significación espiritual y tradición cristiana. La Epifanía, que significa «manifestación», celebra la revelación de Dios a toda la humanidad, simbolizada mediante la adoración de los magos. Para los fieles, este día representa alegría y un profundo sentido de agradecimiento al encontrar y rendir homenaje a Jesús, inspirados por la luz del Evangelio.
Según el relato del Evangelio de San Mateo, los Reyes Magos, sacerdotes eruditos del Antiguo Oriente, viajaron desde sus tierras guiados por una estrella para rendir homenaje al Niño Jesús y ofrecerle regalos de oro, incienso y mirra, cargados de significado simbólico. Aunque sus nombres, Melchor, Gaspar y Baltasar, aparecen por primera vez en un mosaico del siglo VI en la iglesia de San Apolinar el Nuevo, en Rávena, su historia ha perdurado a través de los siglos.
En sus homilías durante la misa de la Solemnidad de la Epifanía del Señor, el Papa Francisco ha instado a los fieles a emular a los Reyes Magos, manteniendo «los ojos fijos en el cielo, los pies sobre la tierra, el corazón postrado en adoración». Francisco destaca que los regalos ofrecidos por los magos tienen un profundo significado: el oro recuerda que Dios debe ocupar siempre el primer lugar en nuestras vidas; el incienso simboliza la oración y nuestra conexión con el Señor; y la mirra, utilizada para envolver amorosamente el cuerpo de Jesús, nos recuerda la importancia de cuidar a aquellos que sufren.
El pontífice también enfatiza la necesidad de dedicar tiempo a la oración, «quemando» un poco de nuestro tiempo para Dios, en un acto genuino de devoción, no solo con palabras, sino con acciones sinceras.
En Venezuela, la celebración de la Epifanía incluye diversas actividades culturales. En Valencia, por ejemplo, grupos que personifican a los tres reyes llevan regalos a los niños hospitalizados en el Hospital Dr. Jorge Lizarraga, parte de la Ciudad Hospitalaria Enrique Tejera. Asimismo, las misas de este día están especialmente dedicadas a los niños, reflejando el espíritu de generosidad y adoración que caracteriza esta festividad.
Si bien antiguamente los Reyes Magos eran quienes traían regalos solicitados por los niños en sus cartas, esta tradición se ha trasladado en gran medida al 25 de diciembre, asociándose ahora más con el Niño Jesús.
La celebración de la Epifanía y la figura de los Reyes Magos continúan siendo un pilar importante de la tradición cristiana, llevando consigo un mensaje de fe, esperanza y amor.