Provea ha actualizado su informe sobre los eventos ocurridos tras las elecciones del 28 de julio de 2024, revelando un aumento alarmante en las violaciones de los derechos humanos en Venezuela. La actualización, que amplía el reporte original publicado el 4 de agosto y la actualización del 6 de agosto, detalla la brutal represión que siguió a las protestas por la percepción de fraude electoral.
El lunes 29 de julio, miles de ciudadanos en comunidades pobres de Venezuela salieron a las calles para protestar contra los resultados de los comicios, en los que el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Nicolás Maduro como ganador sin permitir la supervisión adecuada por parte de la oposición. Las manifestaciones se extendieron durante cuatro días y estuvieron marcadas por una represión violenta por parte de las fuerzas de seguridad y grupos paramilitares conocidos como “colectivos”.
El Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) registró 915 protestas entre el 29 y 30 de julio. Durante este periodo, se documentó el uso desproporcionado de la fuerza, incluyendo munición letal o potencialmente letal, para dispersar a los manifestantes. Provea también reporta la colaboración entre las fuerzas policiales y los grupos paramilitares para atacar a los manifestantes y centros electorales.
En Caracas, se documentaron ataques coordinados contra testigos de la oposición y centros de votación, como el incidente en el Liceo Andrés Bello, donde aproximadamente 600 motorizados intentaron impedir el conteo de votos. Además, se confirmaron al menos dos muertes el mismo día de las elecciones.
El informe destaca que la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) participó en la represión, a pesar de no estar capacitada ni autorizada para manejar manifestaciones. La DAET, vestida de civil o uniformada, impartió órdenes para reprimir a los manifestantes, incluso presionando a otros agentes para usar la fuerza contra los civiles.
La situación se agrava en un contexto de creciente amenaza al espacio cívico en Venezuela, con denuncias de la sociedad civil y organismos internacionales sobre las graves violaciones de los derechos humanos. Provea continúa documentando y denunciando estas violaciones, pidiendo una respuesta internacional para garantizar la protección de los derechos fundamentales en el país.
Venezuela a un mes de las elecciones del 28 de julio:
— PROVEA (@_Provea) August 28, 2024
-25 personas asesinadas en contexto de protestas.
-Más de 2400 detenidos arbitrariamente.
-Al menos 50 desapariciones forzadas.
-Masivas violaciones al debido proceso y DDHH.
Un terrorismo de Estado.https://t.co/Thp8Nt1TQj