El uso de sistemas de alimentación ininterrumpida (UPS) con baterías de litio está en auge en las grandes corporaciones debido a su capacidad para proporcionar un respaldo eléctrico robusto y sus beneficios económicos en términos de reducción de costos operativos y de mantenimiento.
La situación en Venezuela presenta un desafío particular. La falta de adaptación de las empresas locales a la alta demanda energética actual las hace vulnerables a imprevistos que pueden detener sus operaciones, resultando en pérdidas significativas en producción e inversión. Luis Makencie, gerente de Ventas de Corporación Solsica, subraya que las pérdidas económicas por inactividad varían según el tamaño y la naturaleza del negocio. «Mientras más grande sea una compañía, mayor será el impacto que se genere por la inactividad, por lo que urge tener a mano soluciones», afirmó Makencie.
Makencie destaca la importancia de contar con un respaldo eléctrico confiable para proteger la estabilidad financiera ante imprevistos. Recomienda el uso de UPS, que no solo evitan daños en los equipos, sino que también aseguran un suministro continuo de energía en caso de fallos en el servicio.
El especialista asegura que es esencial incorporar UPS con baterías de litio (Li-Ion) en las industrias venezolanas para proteger sus líneas de producción. Estos sistemas ofrecen múltiples ventajas sobre los tradicionales, que utilizan baterías de plomo-ácido. Entre los beneficios, Makencie menciona que las baterías de litio permiten una descarga más profunda, lo que se traduce en un mayor tiempo de autonomía antes de desconectar la carga. Esto garantiza un suministro prolongado de energía en caso de ausencia del servicio eléctrico.
La adopción de estas tecnologías no solo responde a la necesidad de continuidad operativa, sino que también representa una inversión estratégica para mitigar riesgos financieros y operativos en el entorno desafiante de la industria venezolana.
Especial