Una caravana de más de 1,500 migrantes, en su mayoría venezolanos, enfrenta un bloqueo en el estado de Chiapas, al sur de México. Las autoridades mexicanas han impedido su avance hacia el norte, en un contexto de crecientes presiones desde Estados Unidos para controlar el flujo migratorio.
El grupo de migrantes partió desde Huixtla a las 5:00 am (11:00 GMT), escoltado por la Guardia Nacional y la policía municipal. Se ha reportado que los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) han mantenido una vigilancia constante sobre el grupo, incluso intentando detener a una familia en su camino, acción que fue impedida por los propios integrantes de la caravana.
Los migrantes, entre ellos Genaro Cárdenas, manifestaron su intención de llegar a Ciudad de México, donde esperan encontrar mayores oportunidades laborales y preparar sus solicitudes de asilo en Estados Unidos a través del programa CBP One. Cárdenas expresó su temor a ser regresados a Tapachula, una ciudad en la frontera sur de México, conocida por sus duras condiciones para los migrantes.
En el escenario político, la presidenta Claudia Sheinbaum ha asegurado al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, que las caravanas ya no llegan a la frontera estadounidense. Trump, sin embargo, ha advertido sobre la imposición de aranceles del 25% a productos mexicanos si no se detiene este flujo migratorio.
El gobierno mexicano ha defendido su estrategia migratoria enfocada en el desarrollo del sur del país, señalando una disminución del 75% en los encuentros de migrantes en la frontera norte desde diciembre de 2023. Aun así, migrantes como Bryan Joan critican la falta de apoyo gubernamental y denuncian las malas condiciones en la estación migratoria Siglo XXI de Tapachula.
Organizaciones como Médicos Sin Fronteras (MSF) y el Sistema Integral para la Familia (DIF) están brindando asistencia médica a los migrantes, tratando heridas y deshidratación tras las largas y agotadoras jornadas de caminata. La salvadoreña Fabiola Flores destacó que, a pesar de las lesiones sufridas, la caravana avanza pacíficamente y sin intenciones de generar desorden público, buscando simplemente llegar a su destino para descansar.
La situación de estos migrantes refleja las complejidades del fenómeno migratorio en la región, en medio de tensiones políticas y desafíos humanitarios.
El Nacional