La Administración Estatal de Regulación del Mercado de China ha dado a conocer que ha comenzado una investigación formal sobre Google por una presunta violación de la Ley Antimonopolio de China. Esta medida fue anunciada en un comunicado oficial, aunque no se han proporcionado detalles adicionales sobre el alcance de la investigación.
La influencia de Google en China es limitada, ya que el buscador ha estado bloqueado desde 2010 debido a restricciones impuestas por el gobierno chino. Los usuarios en China dependen principalmente de motores de búsqueda y aplicaciones locales, mientras que otros servicios de Google, como su correo electrónico, traducción y mapas, permanecen censurados, siendo accesibles únicamente a través de redes privadas virtuales (VPN) de pago.
La investigación contra Google sucede en un momento de tensiones comerciales entre China y Estados Unidos. Donald Trump, durante su mandato, implementó aranceles del 10 % a productos chinos importados, como parte de una serie de medidas para presionar a la economía china. Además, Trump había ordenado el desarrollo de un fondo de inversión gubernamental para obtener posibles ganancias de TikTok, propiedad de la empresa china ByteDance, en caso de ser adquirida por un comprador estadounidense.
En respuesta a las acciones estadounidenses, China anunció aranceles que oscilan entre el 10 % y el 15 % a ciertos productos estadounidenses a partir del 10 de febrero. También introdujo nuevos controles sobre la exportación de minerales y añadió a dos empresas estadounidenses a su lista de «entidades no fiables». Una de estas empresas es PVH Group, que enfrenta una investigación por presuntamente boicotear el algodón de Xinjiang.
Pekín ha declarado que estas acciones son necesarias para «proteger la soberanía nacional y los intereses de seguridad y desarrollo», según un comunicado del Ministerio de Comercio chino. Las tensiones comerciales entre ambos países se han acentuado desde la primera presidencia de Trump, quien impuso diversas rondas de tarifas, a lo que China ha respondido de manera similar.
Por otro lado, Trump decidió retrasar un mes los aranceles sobre importaciones de Canadá y México, mientras que las tarifas del 10 % sobre productos chinos han entrado en vigor de manera inmediata. Pekín ha prometido represalias y ha presentado una demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por las acciones de Estados Unidos, las cuales consideran como «prácticas ilícitas».
La situación sigue evolucionando, y se espera que ambos países continúen con sus respectivas estrategias comerciales en los próximos días. La comunidad internacional observa de cerca estos desarrollos, conscientes de su impacto potencial en la economía global.
AFP
