El Gobierno de Colombia ha anunciado el despliegue de cerca de 300 efectivos del Ejército en la región del Catatumbo, al noreste del país, como respuesta a los recientes enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Estos conflictos han resultado en el asesinato de varios firmantes de paz y civiles en la zona.
El mayor general Giovanni Rodríguez ha comunicado que el despliegue tiene como propósito principal neutralizar las confrontaciones entre el Grupo Armado Organizado (GAO) Residual, estructura 33, y el ELN. Según Rodríguez, ambas facciones son responsables de los asesinatos y heridas de diversas personas en áreas del Catatumbo.
Las acciones militares incluyen la implementación de rutas de evacuación aeromédica, con apoyo de la Aviación del Ejército y la Fuerza Aérea. Estas rutas son esenciales para evacuar a los heridos en las localidades de El Tarra, Oru y El Tarro, siguiendo las directrices del Puesto de Mando Unificado y del Comando General de las Fuerzas Militares.
El presidente Gustavo Petro ha anunciado a través de su cuenta en X que se está llevando a cabo la evacuación de la población amenazada y de los firmantes de paz con el apoyo del Ejército, en un esfuerzo por proteger a los civiles en medio de la creciente violencia.
Desde que las FARC dejaron las armas tras el proceso de paz de La Habana, tanto el ELN como las disidencias han intensificado su presencia en el Catatumbo, en un intento de controlar corredores estratégicos para el narcotráfico. La situación en la región demanda una atención inmediata para prevenir futuros incidentes y garantizar la seguridad de la población.