Las autoridades de Trinidad y Tobago han declarado un estado de emergencia público debido a la creciente amenaza a la seguridad nacional, motivada por una serie de asesinatos en represalia y el uso alarmante de armas de alta potencia. Esta decisión fue tomada apenas 12 horas después del trágico incidente en que cinco hombres fueron asesinados a tiros en una tienda ubicada en Laventille, al norte de la isla de Trinidad.
El fiscal general interino del país, Stuart Young, destacó en un comunicado que, pese a la gravedad de la medida, la economía no se verá afectada ya que no habrá toque de queda y las actividades comerciales podrán continuar con normalidad. Sin embargo, en el marco de este estado de emergencia, las fuerzas de seguridad tendrán amplias facultades: la Policía estará autorizada a registrar locales y personas sin orden judicial, así como a efectuar detenciones durante 48 horas, con posibilidad de extensión por parte de un magistrado hasta siete días.
Young subrayó que la Fuerza de Defensa también se mantendrá en estado de alerta para colaborar con la Policía en este periodo crítico. Según la información proporcionada por la Policía de Trinidad y Tobago, la declaración del estado de emergencia se basa en represalias por parte de grupos criminales y el uso de tipos específicos de armas. «Estamos viendo un comportamiento descarado por parte de estos elementos criminales en el uso de armas de fuego ilegales, lo que hizo necesario declarar este estado de emergencia público», enfatizó Young.
El fiscal detalló su preocupación sobre el uso de armas de alto calibre en los asesinatos, específicamente mencionando rifles como los 5.56, 7.62, AR-15 y AK-47. Los detalles sobre el ataque reciente siguen siendo imprecisos, pero la Policía sospecha que el tiroteo fue en represalia a un asesinato ocurrido el pasado 28 de diciembre fuera de la comisaría de Besson Street, donde un hombre llamado Travis Williams, de 31 años, fue asesinado al escoltar a un líder de pandilla de Puerto España.
El mes de diciembre ha sido particularmente violento, con 61 homicidios registrados, elevando el total de 2024 a 623 asesinatos, superando así el récord previo de 2022, que fue de 605 muertes. En el año 2023, Trinidad y Tobago se colocó en el puesto 12 a nivel mundial en cuanto a violencia, medido por la cantidad de muertes violentas por cada 100,000 habitantes.
La declaración del estado de emergencia busca contener la escalada de violencia y garantizar la seguridad de los ciudadanos, mientras el gobierno y las fuerzas de seguridad trabajan para restaurar la tranquilidad en el país.
EFE
