Al menos 15 personas continúan detenidas en La Habana después de participar en una protesta el 7 de octubre en el barrio Santa Felicia, Marianao, según confirmó la organización Cubalex. Esta manifestación, motivada por reiterados apagones, fue reprimida por las autoridades, resultando en múltiples arrestos.
Entre los detenidos se encontraba Liván Gómez Castillo, coordinador en La Habana del Partido Unión por Cuba Libre (PUNCLI), quien fue liberado el 10 de octubre. Gómez Castillo informó a Cubalex que aún hay 15 personas bajo arresto en el centro de detención del VIVAC. A él se le había acusado, sin evidencia, de liderar la manifestación y de la aparición de carteles contra el régimen en el municipio. Sin embargo, oficiales revisaron grabaciones que demostraron su ausencia durante la protesta, resultando en su liberación, aunque bajo amenazas.
Sobre el estado de los demás detenidos se desconoce su identidad y situación actual. La manifestación en Santa Felicia se produjo en respuesta a una crisis energética que afecta a la isla, con cacerolazos como forma de expresar el descontento ciudadano por el prolongado corte de electricidad. El Funky, un rapero exiliado, difundió en Facebook un video donde se observa una barricada utilizada para bloquear la calle durante la protesta.
CubaNet reportó que la manifestación ocurrió después de más de nueve horas sin servicio eléctrico. «En 51 y 88B cerraron la avenida. Tocaron calderos en todo el barrio, pero como siempre alguien avisó y vino el camión de la policía. Hacía cuatro días que la corriente la quitaban y ponían cada 10 o 15 minutos, y hoy se había ido desde las dos de la tarde”, expresó una vecina del área.
Otro vecino confirmó que tras la manifestación, el servicio eléctrico fue restablecido rápidamente. Por su parte, una tercera residente relató el constante ir y venir de la electricidad durante el día. «Desde las siete que pusieron la luz la han quitado cuatro veces. ¿Cómo no va a tirarse la gente para la calle? Hoy estuvimos sin corriente desde las dos de la tarde, es demasiado: el calor, la incertidumbre… hasta cuándo será esta desgracia. Y para colmo, casi todo el día sin internet», concluyó.
Este episodio se inscribe en un contexto de creciente malestar popular debido a las dificultades energéticas en la isla, que generan importantes desafíos para sus habitantes.
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