Edmundo González Urrutia, reconocido como el presidente electo de Venezuela por Estados Unidos y varias naciones del mundo, ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para revisar el sistema de financiamiento ilícito que apoya a quienes han mantenido el control en Caracas durante más de dos décadas. En una entrevista exclusiva para Diario Las Américas, González Urrutia enfatizó que «el dinero que se roba en Venezuela, o que emerge como resultado de actividades ilícitas, no puede ser usado impunemente para sostener un régimen antidemocrático en Venezuela».
A pesar de este escenario, Nicolás Maduro ha logrado recobrar el respaldo de ciertos actores en la escena internacional, incluso después de las elecciones del 28 de julio, donde se reafirmó el apoyo al oficialismo venezolano. Este respaldo persiste a pesar de las sanciones internacionales y los cuestionamientos sobre la legitimidad de su mandato.
González Urrutia señaló que la influencia cubana, junto con la rusa e iraní, ha sido crucial en el sostenimiento del gobierno actual. «Dichas fuerzas han concentrado sus acciones en labores de inteligencia, adoctrinamiento y política exterior. Sin embargo, los cambios recientes que estamos observando en la política internacional, incluyendo episodios como la caída del régimen de Bashar Al Assad, sugieren que estos respaldos no son siempre tan sólidos y eternos como parecerían a primera vista», indicó.
Apego a los resultados electorales
González Urrutia subrayó la importancia de que los gobiernos democráticos actúen conforme a los resultados electorales que la oposición logró recolectar, evidenciando un triunfo significativo. Estados Unidos ha intensificado su condena internacional ante lo que considera una votación plagada de irregularidades, advirtiendo a Maduro que el mundo no tolerará una farsa electoral.
El líder de la oposición venezolana destacó las medidas contundentes de la nueva administración de Donald Trump respecto a la situación en Venezuela, reflejadas en los nombramientos estratégicos relacionados con la política hemisférica. «En cargos claves relacionados con la política hacia América Latina han sido designadas personas que conocen de primera mano el funcionamiento de los regímenes de Venezuela, Cuba y Nicaragua, y que ya han dado señales claras de que no aprueban sus comportamientos autoritarios», enfatizó González Urrutia.
La comunidad internacional enfrenta ahora el desafío de abordar estos sistemas de financiamiento ilícito y sus efectos, en medio de un panorama político en constante evolución.