El opositor cubano Eliéxer Márquez Duany, conocido artísticamente como El Funky, ha anunciado que su caso de residencia en los Estados Unidos ha sido reabierto. Esta noticia marca un giro positivo en su situación migratoria, que anteriormente se encontraba en una posición vulnerable debido a la denegación de su solicitud de residencia permanente bajo la Ley de Ajuste Cubano de 1966.
A través de sus redes sociales, El Funky expresó: «Gracias a mi equipo legal mi caso de residencia ha sido abierto. Tengo mucha fe en este gobierno y en el proceso legal. También aclaramos que El Funky no será deportado». Estas declaraciones reflejan un alivio significativo en medio de las tensiones previas, cuando el rapero había advertido que enfrentaba 30 días para abandonar el país o, de lo contrario, sería deportado. En aquel momento, había solicitado apoyo a la comunidad cubana y a congresistas estadounidenses para evitar su regreso a Cuba, donde afirmó no tener libertad de movimiento y enfrentar vigilancia por parte de la Seguridad del Estado.
La situación legal de Márquez Duany se volvió una causa para activistas cubanos en el exilio, quienes emitieron una declaración conjunta solicitando a altos funcionarios estadounidenses, incluido el senador Marco Rubio, que intervinieran en el caso.
Antes de establecerse en Miami, El Funky había sido un miembro prominente del Movimiento San Isidro (MSI), lo que le acarreó detenciones y restricciones en su país de origen. Su compromiso con la libertad de expresión y el activismo fue reconocido internacionalmente cuando se convirtió en uno de los intérpretes del tema «Patria y Vida», el cual obtuvo un Grammy Latino.
El cambio en su estatus migratorio ha sido atribuido al trabajo diligente de su equipo legal, al que Márquez Duany agradeció públicamente por el apoyo brindado durante el último mes. Desde su llegada a Estados Unidos en octubre de 2021, El Funky ha continuado su labor artística y activista, fortaleciendo su presencia en el ámbito internacional.
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