El multimillonario Elon Musk se encuentra en el epicentro de una controversia a raíz de un gesto realizado durante la celebración de la investidura presidencial de Donald Trump, que ha sido comparado en redes sociales con un saludo nazi. Musk ha calificado las críticas como un ataque «cansado», desestimando las acusaciones en su plataforma social X.
El lunes, Musk subió al escenario del Capital One Arena en Washington, donde fue recibido con vítores. En un momento de entusiasmo, levantó los brazos y expresó: “¡Siiii!”. Durante su intervención, Musk afirmó: “Esto no fue una victoria ordinaria. Este fue un punto de inflexión en la civilización humana”.
El gesto que ha causado revuelo fue realizado tras morderse el labio inferior y golpearse el pecho, extendiendo el brazo en un ángulo elevado con la palma hacia abajo. A pesar de las críticas, Musk aseguró en X que las acusaciones eran un ataque obsoleto: “Francamente, necesitan mejores trucos sucios. El ataque de ‘todos son Hitler’ está tan gastado”.
El gesto fue analizado extensamente en línea. Claire Aubin, historiadora especializada en el nazismo en Estados Unidos, lo calificó como un “sieg heil” o saludo nazi, mientras que la profesora de historia de la Universidad de Nueva York, Ruth Ben-Ghiat, también se refirió al gesto de manera crítica.
Por otro lado, Andrea Stroppa, un confidente cercano a Musk, inicialmente compartió el clip del gesto, pero luego lo borró, aclarando que “ese gesto, que algunos confundieron con un saludo nazi, es simplemente Elon, que tiene autismo, expresando sus sentimientos”.
La Liga Antidifamación expresó que, a su juicio, Musk realizó un gesto torpe en un momento de entusiasmo, pero valoró que la gente esté alerta ante posibles expresiones de antisemitismo.
La controversia se suma a las preocupaciones sobre las posiciones políticas de Elon Musk. La presidenta de la comunidad judía de Múnich y Alta Baviera, Charlotte Knobloch, describió el gesto como “altamente perturbador” y criticó el apoyo de Musk al partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), conocido por sus posturas antiinmigración y antiislámicas.
En respuesta a las críticas, Musk compartió un clip de video editado de su discurso en X que evitó mostrar el polémico gesto, centrándose en otros momentos de su intervención.
La polémica en torno al gesto de Musk subraya la sensibilidad continua hacia los símbolos asociados al nazismo y el impacto que pueden tener las figuras públicas en el discurso político contemporáneo.
