Migrantes venezolanos en España podrán utilizar nuevamente sus pasaportes vencidos para llevar a cabo trámites de extranjería, como la solicitud de autorizaciones, permisos y la obtención de la tarjeta de identidad de extranjero. Esta medida, anunciada por la Dirección General de Migraciones y la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, pretende aliviar las dificultades que enfrentan muchos ciudadanos de Venezuela para renovar sus documentos en los consulados de su país en territorio español.
En marzo de 2019, España ya había permitido el uso de pasaportes vencidos para facilitar el acceso de los venezolanos a los trámites de extranjería, debido a las complicaciones para renovar sus pasaportes a través de los servicios consulares. Esta decisión original se tomó en respuesta a las recomendaciones de Acnur, organismo que aboga por garantizar el acceso de los ciudadanos a procedimientos legales en el contexto de una crisis migratoria.
Sin embargo, en noviembre de 2024, al observarse una mejora en el proceso de renovación de pasaportes en los consulados venezolanos, la medida fue revocada. A partir de entonces, se requirió que los pasaportes estuvieran vigentes para realizar trámites de extranjería. No obstante, pese a las mejoras, numerosos venezolanos continuaron enfrentando serias dificultades para renovar sus documentos, situación que dificultó su acceso a los procedimientos legales en España. Este persistente problema llevó a las autoridades a revertir su decisión y restablecer la validez de los pasaportes caducados.
Con la instrucción renovada de enero de 2025, los ciudadanos venezolanos podrán continuar con sus trámites de extranjería aun si sus pasaportes están vencidos. La medida busca asegurar que aquellas personas afectadas por la falta de renovación no queden excluidas de los procedimientos legales necesarios para regularizar su situación migratoria en España.
Este paso reafirma el compromiso de las autoridades españolas de apoyar a la comunidad venezolana en medio de la persistente crisis migratoria y las dificultades consulares.
El Nacional
