Una escultura monumental de Donald Trump desnudo ha generado un revuelo considerable tanto en Las Vegas como a nivel nacional. La figura, que mide 14 metros de altura y pesa casi 3.000 kilos, se erige desafiantemente sobre una carretera al norte de la ciudad, captando la atención de los miles de conductores que transitan por la zona.
La obra, realizada en espuma, muestra al expresidente en una pose que ha provocado reacciones viscerales, siendo calificada de «deplorable» por el Partido Republicano. En un comunicado oficial, el partido expresó su desaprobación tajante, alegando que «las familias que conducen por Las Vegas se ven obligadas a ver esta marioneta ofensiva, diseñada intencionalmente para impactar en lugar de promover un diálogo significativo».
En el mismo documento, los republicanos subrayaron su compromiso con los problemas que afecta a los estadounidenses, destacando su enfoque en la reducción de la inflación, la protección de las fronteras, la creación de empleos y la garantía de un futuro mejor. Además, aludieron a que «mientras los demócratas, especialmente Kamala Harris, continúan priorizando el impacto sobre la sustancia, el presidente Trump es el único candidato en esta carrera que defiende a los hombres y mujeres trabajadores en todo Nevada».
Sobre la autoría de la escultura, los creadores han preferido mantenerse en el anonimato. No obstante, han comentado que la desnudez de Trump en la figura es una decisión deliberada que busca representar la «transparencia, la vulnerabilidad y la personalidad pública de las figuras políticas».
Curiosamente, la aparición de esta colosal estatua coincide con recientes declaraciones de Trump en un mitin en Wisconsin, donde se jactó de su «hermoso» cuerpo, afirmando que es «mucho mejor que el de Sleepy Joe (Biden)».
Por el momento, la imponente figura de un Trump desnudo permanece sostenida por una grúa en un polígono industrial a las afueras de Las Vegas. Según informes de medios locales, está previsto que sea trasladada próximamente, convirtiéndose así en un controvertido añadido al paisaje de la ciudad.