Las delegaciones del gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) se reunirán este viernes en Venezuela con el fin de retomar las conversaciones de paz, según confirmó Otty Patiño, consejero comisionado de paz de Colombia. Este nuevo encuentro busca destrabar el proceso de diálogo que ha estado en pausa desde hace varios meses.
Desde el mes de mayo, las partes no han sostenido reuniones formales, y el ciclo de diálogo se encuentra estancado desde finales de enero debido a una cadena de desentendimientos. Estos desencuentros impidieron la renovación del cese al fuego bilateral, el cual expiró el 3 de agosto estaño. Tal cese representó la tregua más prolongada con esta guerrilla en los últimos años.
Las negociaciones fueron suspendidas tras un ataque perpetrado por el ELN el 17 de septiembre en una base del Ejército situada en el departamento de Arauca, cerca de la frontera con Venezuela. El atentado resultó en la muerte de tres militares y una treintena de heridos. A pesar de la gravedad de este ataque, Patiño se muestra optimista y espera que la reunión permita que el ELN contemple la territorialización de la paz como un estimulante para continuar con su proceso.
Las conversaciones de paz, que se reiniciaron en noviembre de 2022 en Caracas, han enfrentado desafíos desde inicios del año. Uno de los mayores escollos ha sido la demanda del ELN de ser retirados de la lista de grupos terroristas, y la exigencia de que el gobierno cese el diálogo con los Comuneros del Sur, considerado por el ELN como una disidencia dentro de sus filas.
A pesar de las tensiones, en anteriores ciclos de negociaciones en Caracas, La Habana y Ciudad de México, se lograron acuerdos parciales que incluyeron la aprobación del modelo de participación de la sociedad civil en el proceso de paz y un cese al fuego bilateral que lamentablemente no se logró prolongar.
El gobierno colombiano había anunciado la «suspensión» de los diálogos tras el ataque en Puerto Jordán (Arauca), pero desea seguir apostando por el diálogo como herramienta para alcanzar la paz. Ante este nuevo intento de negociar, Patiño sostuvo: «Nosotros no tenemos líos con Venezuela, Venezuela tiene unos líos internos en los cuales preferimos no meternos».
Este nuevo ciclo de conversaciones no solo representa una oportunidad para revivir el proceso de paz, sino también un reto para superar los obstáculos que han frenado el avance hacia una Colombia en paz. Las expectativas están puestas en que, esta vez, ambas partes logren encontrar un terreno común que permita una resolución pacífica y sostenible del conflicto.