John Hurley, nominado por el presidente Donald Trump para liderar la estrategia de sanciones de Estados Unidos, ha emitido una advertencia significativa respecto a las posibles repercusiones para las naciones que continúen importando petróleo venezolano. Esta declaración subraya la línea dura del gobierno de Trump contra el régimen de Nicolás Maduro y podría impactar especialmente a países como China.
La advertencia de Hurley, que ha trabajado previamente en fondos de cobertura y ha sido propuesto para supervisar el brazo de inteligencia financiera y antiterrorismo del Departamento del Tesoro, sigue a una orden ejecutiva reciente de la Casa Blanca. Esta orden indica que los países que adquieran petróleo y gas de Venezuela, miembro de la OPEP, podrían enfrentar aranceles del 25% en su comercio con Estados Unidos.
“El presidente Trump está enviando un mensaje claro de que el acceso a nuestra economía es un privilegio, no un derecho, y los países que importan petróleo venezolano enfrentarán consecuencias”, señaló Hurley en sus respuestas al Comité Bancario del Senado de Estados Unidos, según un documento obtenido por Bloomberg News.
Los potenciales aranceles secundarios podrían afectar a una amplia gama de compradores del crudo venezolano, aunque China es uno de los principales destinos. Estos comentarios destacan una postura más agresiva que la mantenida por la administración de Joe Biden, quien en 2023 permitió a empresas como Repsol, Maurel & Prom y Reliance Industries Ltd. operar y adquirir petróleo venezolano.
La estrategia de sanciones de Estados Unidos, bajo el liderazgo de Hurley, busca reforzar la presión sobre el gobierno de Maduro, alineando las políticas comerciales y energéticas con los intereses geopolíticos de la nación norteamericana.
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