Catorce personas de nacionalidad española permanecen detenidas «arbitrariamente» en cárceles de Venezuela, según informa el gobierno de España en una respuesta parlamentaria escrita a una pregunta del partido conservador UPN. La mayoría de los detenidos poseen doble nacionalidad, excepto dos ciudadanos de la región del País Vasco, arrestados hace al menos nueve meses.
El Ejecutivo, bajo la dirección del socialista Pedro Sánchez, confirma estas detenciones, resaltando que prácticamente todos los afectados son nacidos y residentes en Venezuela. Uno de los casos destacados es el de Fernando Noya, detenido el 5 de mayo de 2020. Su hermana Verónica, residente en España desde hace seis años, ha expresado a la agencia EFE su solicitud al gobierno para que vele por los derechos humanos de todos los detenidos, y no solo por los de los dos ciudadanos vascos: José María Basoa y Andrés Martínez Adasme.
Estos dos últimos individuos son acusados de estar involucrados en una presunta operación destinada a llevar a cabo actos «terroristas», incluyendo un supuesto plan para asesinar al presidente venezolano, Nicolás Maduro.
Verónica también ha manifestado que su esposo, militar, se encuentra encarcelado en Venezuela, enfrentando una condena de casi 30 años. Familiares de presos españoles se sienten «totalmente desamparados» por el Ejecutivo, afirmando que nadie se ha comunicado con ellos para interesarse por la situación de estos «presos políticos», de los cuales desconocen los detalles de sus expedientes penales.
A pesar de ello, Verónica reclama al gobierno español que exija al gobierno de Maduro la «liberación inmediata» de estas personas y solicita apoyo para el resto de «presos políticos» venezolanos, instando a que se actúe con justicia para que todos sean liberados.
EFE