El Grupo IDEA, conformado por exjefes de Estado y de Gobierno de la Iniciativa Democrática de España y las Américas, ha emitido un comunicado solicitando la intervención de la Santa Sede en la situación crítica que enfrenta la embajada de Argentina en Venezuela. En nombre de los expresidentes hispanoamericanos, el grupo se dirigió al representante diplomático de la Santa Sede en Caracas, solicitando la transmisión de una nota verbal a sus colegas del Cuerpo Diplomático.
El comunicado expresa una profunda preocupación por el acoso sistemático al que ha sido sometida la sede diplomática argentina, debido a las acciones de las autoridades de facto en Venezuela. Según el documento, esta situación se manifiesta en la persecución política de los asilados venezolanos presentes en la embajada, lo cual constituye una violación flagrante de sus derechos humanos, incluyendo el derecho a la vida y a la integridad personal.
El secretario de Estado de la Santa Sede, Su Eminencia Pietro Cardenal Parolin, ha respondido a los exjefes de Estado en una carta fechada el pasado 8 de febrero. En ella, Parolin afirmó que la Santa Sede continúa manifestando su preocupación ante las autoridades competentes sobre la situación descrita.
El Grupo IDEA subraya que los embajadores acreditados en Venezuela deben reconocer que estas acciones podrían constituir crímenes de lesa humanidad, según el Estatuto de Roma. Además, el cerco policial y armado impuesto sobre la embajada, que impide el ingreso de insumos vitales, se considera un atentado grave contra el principio de inviolabilidad de los locales diplomáticos, el cual es fundamental en las relaciones internacionales y está profundamente arraigado en el Derecho internacional.
Se destaca que el derecho de asilo está intrínsecamente vinculado con el respeto a la sede diplomática según lo establecido en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y la Convención de Caracas sobre Asilo Diplomático. Estos son considerados normas imperativas del Derecho internacional, las cuales deben ser observadas y respetadas en toda circunstancia.
El Grupo IDEA insta a una acción coordinada y efectiva por parte de la comunidad diplomática para asegurar el respeto de los derechos humanos de los asilados y mantener la integridad de las sedes diplomáticas como un pilar de las relaciones internacionales.