La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha elevado una solicitud a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) para que dicte medidas provisionales en el caso del dirigente opositor venezolano Juan Pablo Guanipa Villalobos, cuyo paradero se desconoce desde su detención por el gobierno de Nicolás Maduro el pasado 23 de mayo. La CIDH ha señalado que Guanipa se encuentra en una situación de «extrema gravedad y urgencia de daños irreparables», lo que requiere una respuesta inmediata para garantizar su vida e integridad.
Desde octubre de 2024, Guanipa era beneficiario de medidas cautelares, sin embargo, el Estado venezolano no ha proporcionado información sobre su ubicación ni sobre las acciones tomadas para protegerlo. Altos funcionarios del chavismo confirmaron su detención, pero desde entonces no existen datos oficiales respecto a su estado de salud o el lugar de su reclusión, lo que ha llevado a la CIDH a advertir sobre un posible caso de desaparición forzada, prohibida por el artículo XIII de la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas.
La CIDH ha considerado que la situación de Guanipa se enmarca en el supuesto de extrema gravedad, urgencia e irreparabilidad del daño establecido en el artículo 63.2 de la Convención Americana. La solicitud de medidas provisionales busca que la Corte IDH ordene al Estado venezolano informar sobre la situación del dirigente y garantizar su integridad física y psicológica.
Juan Pablo Guanipa, dirigente del partido Primero Justicia en el estado Zulia, es reconocido como un actor clave dentro de la oposición venezolana desde el año 2000. Ha sido aliado de María Corina Machado y Edmundo González Urrutia en las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. La CIDH ha recordado que Guanipa ha sido víctima de una persecución política sistemática, que se ha intensificado en el contexto electoral reciente.
Las medidas provisionales de la Corte IDH son de cumplimiento obligatorio para los Estados miembros y se dictan en casos de riesgo inminente. Esta decisión podría generar una mayor presión internacional sobre el régimen de Maduro para que cumpla con sus obligaciones en materia de derechos humanos y responda por la desaparición del dirigente opositor. Hasta el momento, las reiteradas solicitudes de información de la CIDH no han sido respondidas por el gobierno venezolano, lo que incrementa la preocupación por la situación de Guanipa.
Espiga Noticias