La Misión de Establecimiento de los Hechos de la ONU para Venezuela alertó este viernes sobre el grave riesgo de desintegración del Estado de derecho en el país, citando el deterioro de la situación de los derechos humanos y la reactivación de la «maquinaria represiva» del gobierno tras las elecciones del 28 de julio.
Durante su intervención en el Consejo de Derechos Humanos, la presidenta de la Misión, Marta Valiñas, afirmó que las violaciones documentadas son el resultado de un plan sistemático diseñado para desalentar, silenciar y anular la oposición política, así como a las voces críticas que exigen transparencia en los resultados electorales.
El último informe de la Misión revela una alarmante continuidad en los abusos de los derechos humanos, incluyendo detenciones arbitrarias, torturas y violencia sexual, las cuales han sido catalogadas como crímenes de lesa humanidad en el pasado.
La Misión instó a la comunidad internacional a tomar medidas urgentes para abordar estas violaciones y proteger a los ciudadanos venezolanos en medio de un contexto cada vez más represivo.