Desde la logia central de la basílica de San Pedro, el Papa Francisco hizo un llamamiento este miércoles dirigido a las autoridades políticas del continente americano para encontrar soluciones que promuevan la armonía social, haciendo especial mención a Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua. Este mensaje formó parte de su tradicional alocución de Navidad.
En su discurso, el pontífice destacó: «Que el Niño Jesús inspire a las autoridades políticas y a todas las personas de buena voluntad del continente americano, con el fin de encontrar lo antes posible soluciones eficaces en la verdad y la justicia, para promover la armonía social, en particular en Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua». Estas palabras subrayan la urgencia de enfrentar los desafíos sociopolíticos en la región.
Además, Francisco instó a que se trabaje para edificar el bien común y redescubrir la dignidad de cada persona, superando las divisiones políticas, especialmente durante el Año Jubilar, un periodo importante en la tradición católica que enfatiza la reconciliación y el perdón.
El Papa utilizó esta plataforma para recordar los conflictos globales y los problemas que afectan a diversas naciones, antes de impartir la famosa bendición ‘Urbi et Orbi’. Este evento reunió a unas 30.000 personas en la Plaza de San Pedro, quienes acudieron para escuchar el mensaje del líder de la Iglesia Católica.
En un apartado especial, Francisco se refirió a la situación en Ucrania, pidiendo que «callen las armas en la martirizada Ucrania» y que se tenga la audacia de abrir la puerta a las negociaciones y al diálogo, con el objetivo de alcanzar una paz justa y duradera. Este llamado a la paz refleja su constante preocupación por el bienestar global y el fin de los conflictos armados.
En un mundo convulsionado por diversas tensiones, el mensaje del Papa Francisco resuena como un recordatorio de la necesidad de soluciones basadas en la verdad y la justicia para lograr una convivencia armónica entre las naciones y sus ciudadanos.