El presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, ha tomado la decisión de destituir a Miguel Mejía, quien se desempeñaba como ministro sin cartera para Políticas de Integración Regional. La destitución fue confirmada a través del Decreto 8-25, que deroga el artículo 26 del Decreto 246-16, en el cual Mejía había sido designado el 14 de septiembre de 2016.
La figura de Miguel Mejía ha estado en el centro de numerosas controversias dentro del ámbito político y público dominicano. Conocido por su cercanía a gobiernos cuestionados internacionalmente como los de Cuba, Venezuela y Nicaragua, Mejía ha defendido abiertamente la integración regional bajo modelos ideológicos de izquierda. Esta postura ha generado críticas en diversos sectores que consideran que tales alianzas pueden no ser beneficiosas para los intereses democráticos y económicos de la República Dominicana.
El cese de Mejía se produce en un contexto de tensiones políticas, apenas horas después de que expresara críticas hacia la postura del presidente Abinader respecto a Venezuela. Cabe destacar que estas declaraciones se dieron tras la recepción del líder opositor venezolano, Edmundo González Urrutia, en el Palacio Nacional, un evento que subrayó las discrepancias internas sobre cómo manejar las relaciones con el país sudamericano.
La destitución de Miguel Mejía podría implicar un replanteamiento de las políticas de integración regional del gobierno dominicano. Asimismo, es probable que esta decisión influya en las relaciones internacionales del país, especialmente con naciones de ideología afín a la que defendía el exministro. La medida adoptada por el presidente Abinader refleja el compromiso de su administración con una política exterior alineada con principios democráticos.