El Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar ha instado a la comunidad internacional y a las partes en conflicto a “aprovechar la ventana de oportunidad” generada por el alto el fuego entre Israel e Irán, con el objetivo de lograr una tregua definitiva en la Franja de Gaza. Majed al-Ansari, portavoz del ministerio y asesor del primer ministro catarí, enfatizó durante una entrevista con AFP que “si no aprovechamos este impulso, será una ocasión perdida entre muchas otras en el pasado cercano”.
Qatar, en colaboración con Estados Unidos y Egipto, está intensificando esfuerzos diplomáticos para relanzar las conversaciones entre Israel y Hamás, en un momento en que se observa una posibilidad real de desescalada. El alto el fuego actual se estableció el martes, tras un acuerdo facilitado por Washington y Doha, solo horas después de una salva de misiles iraníes dirigidos a una base militar estadounidense en Qatar.
En paralelo, el presidente estadounidense, Donald Trump, expresó su optimismo respecto a un alto el fuego en Gaza, que podría concretarse “incluso para la próxima semana”. El anuncio del cese de fuego entre Israel e Irán ha generado presiones internas en Israel para ampliar la tregua e incluir a Gaza. El primer ministro Benjamin Netanyahu enfrenta presión política para cerrar un acuerdo que libere a los rehenes y ponga fin a los ataques.
Un momento clave para la diplomacia regional
Analistas internacionales subrayan que el impasse entre Irán e Israel ofrece una oportunidad inédita para catalizar un acuerdo mucho más amplio en Oriente Medio. Qatar, históricamente mediador en múltiples conflictos, ha sido clave en negociaciones anteriores entre Estados Unidos e Irán, Hezbollah, Hamás y otros actores.
No obstante, los desafíos persisten: las negociaciones aún no han concretado detalles sobre la extensión de la tregua en Gaza ni ajustes humanitarios o políticos. Las partes mantienen condiciones divergentes, como requisitos de desarme, liberación de prisioneros y supervisión internacional.
Qatar hace un llamado urgente a las partes involucradas y a los mediadores, para que aprovechen esta “ventana de oportunidad” y esfuerzo diplomático convergente, con el fin de detener inmediatamente las hostilidades y abrir un proceso sostenible hacia la paz y la reconstrucción.
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