En un esfuerzo por salvaguardar los derechos de los migrantes en Estados Unidos, los senadores demócratas hispanos Alex Padilla, Catherine Cortez Masto y Ben Ray Luján han instado al presidente Joe Biden a extender los beneficios migratorios implementados durante su administración. Esta solicitud surge ante la preocupación de un posible retorno de Donald Trump a la presidencia, lo que podría poner en riesgo dichas medidas.
Según la agencia Efe, los legisladores han dirigido una carta al mandatario, solicitando específicamente la ampliación del Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) para ciertos países elegibles. Asimismo, han hecho hincapié en la necesidad de incorporar a los migrantes ecuatorianos entre los beneficiarios de este programa.
“El empeoramiento de las crisis en países de todo el mundo, incluidos Ecuador, Nicaragua y El Salvador, sigue poniendo en peligro a cientos de miles de personas. Los nacionales de estos tres países no pueden regresar a sus hogares debido a las graves circunstancias”, explicaron los senadores en su comunicado.
Protección a los Migrantes
Estados Unidos cuenta con programas que favorecen a migrantes de países afectados por conflictos armados, desastres naturales o circunstancias extraordinarias que impiden su retorno seguro. Entre estos programas destaca el TPS, un recurso migratorio que actualmente ampara a más de 860.000 extranjeros. De estos, la mayoría son venezolanos (344.335), seguidos de haitianos (200.005) y salvadoreños (180.375), con protecciones que se encuentran vigentes hasta el próximo año.
En la actualidad, inmigrantes de 16 países se benefician de este programa. Cabe recordar que, durante su anterior administración (2017-2021), Trump intentó eliminar las protecciones del TPS para seis países: El Salvador, Haití, Nicaragua, Honduras, Sudán y Nepal.
El informe de Efe también indica que los senadores han solicitado al gobierno acelerar la renovación de los permisos de trabajo para los beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA). Este programa, que protege a jóvenes inmigrantes que llegaron al país en su infancia, ya enfrentó intentos de finalización por parte del presidente electo durante su administración anterior.
Con esta acción, los senadores buscan garantizar que las políticas migratorias continúen brindando apoyo a quienes más lo necesitan, frente a un panorama político incierto que podría alterar significativamente el rumbo de las políticas vigentes.