Un jet privado Cessna Citation II se estrelló esta mañana mientras intentaba aterrizar de emergencia en el Aeropuerto Regional de Statesville, en Carolina del Norte, causando la muerte de las seis personas a bordo, entre ellas el ex piloto de NASCAR Greg Biffle, su esposa y sus dos hijos, según confirmaron autoridades locales y federales.
El accidente ocurrió alrededor de las 10:20 a.m. hora local, cuando la aeronave, un Cessna C550 registrada como N257BW y propiedad de Greg Biffle, despegó del mismo aeropuerto y experimentó aparentes problemas mecánicos momentos después del despegue. De acuerdo con testigos oculares, el avión descendió abruptamente y se incendió al tocar tierra, generando una columna de humo visible desde varios kilómetros de distancia.
Fuentes locales indicaron que el jet realizó un giro pronunciado para intentar regresar al aeropuerto, pero el aterrizaje falló de forma catastrófica, derivando en un impacto violento seguido de un incendio masivo. El aeropuerto, que sirve habitualmente a equipos de NASCAR y empresas de Fortune 500, permanece cerrado mientras se desarrolla la pesquisa oficial.
Entre las víctimas se encuentran Greg Biffle, de 55 años; su esposa, Cristina Grossu; su hija Emma Elizabeth, de 14 años; y su hijo Ryder Jack, de 6 años. Las identidades de los otros dos ocupantes, posiblemente el piloto y un copiloto, no han sido confirmadas oficialmente por las autoridades. La noticia fue corroborada por Garrett Mitchell, conocido como Cleetus McFarland en YouTube, quien indicó que la familia Biffle se dirigía a visitarlo cuando ocurrió la tragedia.
Biffle, originario de Vancouver, Washington, tuvo una carrera destacada en NASCAR, compitiendo en la Cup Series, Xfinity y Trucks, donde acumuló múltiples victorias. En 2023 fue reconocido como uno de los 75 mejores conductores en la historia de la serie. Más recientemente, se distinguió por sus esfuerzos humanitarios durante el huracán Helene en 2024, cuando utilizó un helicóptero para transportar suministros esenciales a zonas afectadas en el oeste de Carolina del Norte y colaboró con Starlink, de Elon Musk, para ayudar a restaurar la conectividad en áreas sin electricidad.
La Administración Federal de Aviación (FAA) y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) han iniciado una investigación inmediata sobre las causas del siniestro. Un equipo de la NTSB llegó al lugar del accidente esta tarde, y se espera una conferencia de prensa mañana para proporcionar más detalles sobre las circunstancias del vuelo y las posibles causas del accidente.
La comunidad de NASCAR y el mundo del automovilismo han expresado su consternación por la pérdida de Biffle y su familia. Mensajes de condolencias se han multiplicado en redes sociales, resaltando su trayectoria deportiva y su labor filantrópica. “Estamos devastados. Nuestros pensamientos y oraciones están con todos los que los amaban”, publicó el medio especializado The Daily Downforce.
Este incidente se enmarca en el contexto de la aviación general, que presenta tasas de accidentes más altas que los vuelos comerciales. Las autoridades han señalado que será la investigación oficial la que determine si factores como fallos mecánicos, error humano o condiciones climáticas contribuyeron al siniestro.
Las familias de las víctimas han solicitado privacidad en este momento de duelo. Se prevé que se revelen más detalles en las próximas horas a medida que avance la investigación y las autoridades completen las tareas en el lugar del accidente.
