Un tribunal de la región de Tarija, al sur de Bolivia, ha citado al expresidente Evo Morales para presentarse ante la corte el 14 de enero de 2025, dentro de un proceso judicial por trata agravada de personas. La causa involucra una supuesta relación del exmandatario con una menor de edad, con quien se presume tuvo un hijo.
El documento judicial, firmado por el juez Nelson Rocabado del Juzgado Quinto de Instrucción Penal, Anticorrupción y Contra la Violencia a la Mujer, señala que la audiencia será pública y presencial. Está programada para las 9:30 am y contará con la presencia de la autoridad fiscal y demás sujetos procesales. En el edicto, Morales y la madre de la presunta víctima son identificados como «imputados».
La notificación judicial detalla que la menor, en 2014, habría sido «captada» por la ‘guardia juvenil’ bajo el liderazgo de Morales y el grupo Generación Evo. Se especifica que tanto la madre como el padre, actualmente detenido desde octubre por este caso, facilitaron el contacto entre la menor y Morales. El tribunal indica que el expresidente, «aprovechándose de la vulnerabilidad de la víctima y el consentimiento de los padres», logró mantener a la menor «a su disposición» en varios destinos dentro y fuera de Bolivia.
El documento también sostiene que Morales utilizó a la menor para «satisfacer sus necesidades sexuales» en diversos eventos y viajes, ignorando el hecho de que la víctima era una adolescente de 14 años.
En respuesta a estas acusaciones, Morales y sus partidarios han manifestado reiteradamente que este caso fue previamente desestimado y ahora ha sido «desarchivado» con la intención de perjudicar su imagen de cara a una posible candidatura en las elecciones presidenciales de 2025.
Este desarrollo judicial añade una nueva capa de complejidad al panorama político en Bolivia, donde la figura de Morales sigue siendo un tema central de debate y controversia. El desenlace de este proceso podría tener significativos efectos en el futuro político del país.