El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha extendido una invitación oficial al líder de la Iglesia católica, León XIV, para que visite la Casa Blanca. Esta invitación fue comunicada a través de una carta entregada personalmente por el vicepresidente JD Vance al sumo pontífice, según confirmó la portavoz del gobierno estadounidense, Karoline Leavitt.
Leavitt declaró que «el vicepresidente entregó al papa una carta del presidente y de la primera dama», subrayando la importancia de este gesto diplomático. Asimismo, la vocera señaló que el mandatario estadounidense “espera que la visita sea cuanto antes”.
El contexto de esta invitación se establece en un momento significativo para la Iglesia católica. El jueves 8 de mayo, Robert Francis Prevost fue elegido como el nuevo papa, adoptando el nombre papal de León XIV. Prevost, natural de Chicago y de 69 años, había sido nombrado en 2023 como prefecto del Dicasterio para los Obispos, una posición clave en la asesoría para la designación de nuevos obispos por parte del papa Francisco. Con una trayectoria notable como misionero en Perú, es también Arzobispo-Obispo emérito de Chiclayo y fue nombrado cardenal en 2023, además de presidir la Pontificia Comisión para América Latina.
El nuevo pontífice enfrenta desafíos significativos en su mandato, según sostienen expertos en el ámbito religioso. Entre estos retos se incluyen la unidad de la Iglesia, las guerras en curso, las finanzas del Vaticano, y la implementación de la sinodalidad como nuevo paradigma eclesial. Otros temas críticos son el manejo del abuso sexual, la posición de la mujer en la Iglesia y el diálogo interreligioso, que permanecen como aspectos prioritarios en la agenda del papa León XIV.
Esta invitación de Trump al nuevo papa no solo refuerza los lazos diplomáticos entre Estados Unidos y el Vaticano, sino que también marca un momento clave en la relación entre ambos líderes en un período de reconfiguración para la Iglesia católica.
EFE
