Una alarmante serie de eventos se desarrolló en Kissimmee, Florida, cuando Brianna Alvelo, de 22 años, fue arrestada bajo cargos de intento de asesinato, secuestro y agresión con agravantes. La acusación surge tras un incidente en el que una clienta embarazada fue apuñalada 14 veces después de una disputa por una propina de 2 dólares.
De acuerdo con los registros judiciales, los hechos tuvieron lugar en un motel de Kissimmee, donde una mujer, acompañada de su novio y su hija de cinco años, había solicitado una pizza de Marco’s. Según el relato, tras recibir el pedido, que ascendía a 33 dólares, la mujer intentó pagar con un billete de 50 dólares. Alvelo, sin cambio, aceptó una propina de solo 2 dólares.
Más tarde esa noche, la tranquilidad del motel fue interrumpida por golpes insistentes en la puerta de la habitación. Al abrir, la mujer fue sorprendida por un hombre y una mujer enmascarados vestidos de negro. El hombre, aún no identificado, portaba un arma de fuego y obligó al novio a entrar al baño, mientras que la otra figura, presuntamente Alvelo, brandía una navaja.
Alvelo procedió a saquear el bolso de la víctima y destruyó la Nintendo Switch de su hija. En un intento por proteger a su hija, la mujer recibió un ataque con un cuchillo, resultando en heridas en el pecho, brazos, piernas y abdomen. Durante el caos, la madre también sufrió la destrucción de su teléfono móvil.
Tras el ataque, el hombre armado ordenó la retirada. La víctima, al recibir atención médica, descubrió además que estaba embarazada.
Consecuencias Legales y Avances en la Investigación
Brianna Alvelo enfrenta cargos severos, incluyendo intento de asesinato y allanamiento con arma de fuego. Hasta el momento, no cuenta con representación legal y ha solicitado un abogado de oficio. Las autoridades continúan investigando para identificar al cómplice masculino. Este incidente resalta no solo la gravedad del acto, sino también el impacto en las vidas de las víctimas, quienes habían planificado una celebración inocente que se tornó en una experiencia traumática.
El caso avanza hacia una audiencia preliminar, mientras la comunidad local permanece alerta, aguardando que se haga justicia para la familia afectada.
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