El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se abstuvo de ofrecer disculpas a su homólogo estadounidense, Donald Trump, tras un enfrentamiento en el Despacho Oval de la Casa Blanca. Durante una entrevista con Fox News, Zelenski manifestó su respeto hacia Trump, pero subrayó: «No estoy seguro de que hayamos hecho algo malo».
La reunión tuvo lugar bajo la atenta mirada de las cámaras de televisión, situación que el mandatario ucraniano lamentó, indicando que ciertas discusiones quizás deberían realizarse «lejos de los medios». Zelenski describió la conversación con Trump y el vicepresidente JD Vance como «honesta», y añadió que la situación no beneficia a ninguna de las partes.
Cuestionado sobre el impacto de este enfrentamiento en el pueblo ucraniano, Zelenski fue claro: «Los estadounidenses y los europeos son nuestros mejores amigos, y Putin y Rusia son nuestros enemigos». Afirmó su intención de no modificar la postura de Ucrania respecto a Rusia, resaltando que simplemente se trata de un reconocimiento de la situación real.
En medio de esta tensión, Zelenski expresó su gratitud hacia el pueblo estadounidense, el Congreso y el Gobierno por su apoyo durante los tres años de conflicto bélico. Sin embargo, el presidente ucraniano enfrenta presiones internas, pues el senador republicano Lindsey Graham ha solicitado su renuncia para mejorar las relaciones entre Estados Unidos y Ucrania. Zelenski descartó esta posibilidad, reafirmando su intención de continuar en su cargo.
El encuentro en la Casa Blanca culminó abruptamente con la salida de Zelenski, quien debía firmar un acuerdo sobre minerales raros que Trump había exigido como condición para seguir apoyando a Kiev. La suspensión de este acuerdo, junto al posible freno en el envío de equipamiento militar por parte de Estados Unidos, refleja un deterioro significativo en las relaciones bilaterales.
El tenso intercambio entre ambos líderes marca un punto crítico en las relaciones entre Ucrania y Estados Unidos desde el inicio de la invasión rusa. Ahora, la comunidad internacional observa con atención los desarrollos futuros en esta relación estratégica.
EFE